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Comentarios
A mi madre, que trabajó durante muchos años como enfermera en Roma, le ocurrió una experiencia muy inquietante, que la marcó mucho. Estuvo cuidando a una paciente, a la cual le suministraron durante un tiempo morfina, por los dolores derivados de la enfermedad que sufría. Esta mujer le cogió muchísimo afecto a mi madre. Tras curarse, y ser dada de alta, se quedó con adicción a la morfina, y tenía necesidad de ser inyectada diariamente de dicha sustancia en su casa. Solamente quería ser atendida por mi madre, a la que llamaba afectuosamente "Gianna" (diminutivo de Giovanna). Una noche que le tocó guardia nocturna en el hospital, oyó claramente la voz de la señora, llamándola, con el diminutivo cariñoso, varias veces seguidas, desde el pasillo de planta. A la mañana siguiente, supo que la mujer se había muerto, esa misma noche, a la hora en que escuchó su voz.
soy enfermera he trabajado 35 años 34 de noche en un hospital de Madrid , he trabajado de noche y jamás he experimentado nada de nada y tampoco he oido nada
A mi me dieron en la nuca.
magnífico
👏🏽👏🏽👏🏽👏🏽👏🏽
Genial